La presencia de una ministra nacional en una catástrofe provincial resalta la magnitud del desastre, pero también expone las grietas en la cooperación federal. Mientras la ayuda directa a los afectados es la prioridad declarada, la creación de un centro logístico nacional en territorio provincial y las declaraciones cruzadas pueden interpretarse como un movimiento que, además de asistir, busca marcar la presencia y capacidad de gestión del gobierno central frente a la administración provincial. Es relevante observar cómo se articula esta ayuda en la práctica y si la disputa política afecta la eficiencia de la respuesta a los damnificados.