La presentación de la reforma desde una unidad penitenciaria es una declaración simbólica sobre la orientación de la política de seguridad del gobierno. Mientras el endurecimiento de las leyes penales responde a una demanda ciudadana, la criminología debate sobre la eficacia del punitivismo como única herramienta. Es fundamental que la discusión pública evalúe el impacto de estas medidas en el sistema carcelario, su capacidad de rehabilitación y la necesidad de complementarlas con políticas de prevención, inversión social y educación para abordar las causas estructurales de la inseguridad.