Este récord de exportaciones es un indicador macroeconómico positivo, especialmente por su fundamento en un aumento de volúmenes, lo que denota una expansión productiva genuina. Sin embargo, es prudente analizar la sostenibilidad de esta tendencia y la capacidad de la economía para consolidar la diversificación exportadora. El monitoreo de la dinámica de los precios internacionales y la evolución de sectores rezagados, como el turismo receptivo, serán esenciales para evaluar el impacto estructural de este desempeño y su contribución a una estabilidad económica de largo plazo.