La recuperación macroeconómica en Argentina es un proceso complejo y heterogéneo. Mientras algunos sectores muestran signos de mejora, como el agro y el inmobiliario, persisten importantes 'bolsones' de vulnerabilidad social y económica, especialmente en el empleo informal y la situación de las PyMEs. Esto sugiere que la estabilización de la economía aún no se traduce en un bienestar generalizado, requiriendo políticas que garanticen que los beneficios de la recuperación lleguen a todos los estratos de la sociedad.